Cuestiones de química cerebral II

Hace unas cuantas entradas comenzamos a hablaros de química cerebral con neurotransmisores y hormonas que contribuyen a la parte sexual y sexuada de nuestro cerebro, conducta y emociones.

Después de hablar de dos de los más importantes, la feniletilamina y la oxitocina, vamos a profundizar en otros de los que oímos mucho hablar en televisión, medicina y demás: dopamina, serotonina y endorfinas.

Si hablamos de satisfacción, hablamos de dopamina

La dopamina es uno de los neurotransmisores más importantes, involucrado en todas las sensaciones de satisfacción que solemos tener. Forma parte de nuestro día a día. La liberamos, por ejemplo, cuando hacemos ejercicio, cuando comemos cosas que nos gustan, escuchando música… y por supuesto, está involucrada en los encuentros eróticos.

La dopamina aparece en los encuentros y forma parte de varios procesos, por ejemplo, el deseo sexual o las erecciones. Tiene mucho sentido si tenemos en cuenta lo que mencionamos anteriormente y que el sexo está categorizado de ejercicio físico intenso.

Y si hablamos de bienestar, de serotonina

Aunque hablemos de serotonina relacionándola directamente con la felicidad, lo cierto es que se encarga de regular los estados de ánimo y el bienestar. Y justo de eso es de lo que hablamos y de lo que va esta página web, de bienestar sexual. Está íntimamente relacionada con la dopamina y aparece asociada al deseo y también a los orgasmos.

Endorfinas, la analgesia natural

Y para acabar, hablamos de una sustancia que liberamos en relación al dolor y al placer, las endorfinas. Son analgésicos naturales y los liberamos durante las relaciones sexuales (entre otros momentos). Además de ser muy importantes para el placer, también están relacionadas con el momento de llegar al orgasmo.

El combo endorfinas, dopamina, serotonina y oxitocina se las conoce como hormonas de la felicidad porque todas están involucradas en ese proceso. Como vemos, también todas están relacionadas, de una manera u otra, con las relaciones sexuales.

Por supuesto, las personas somos un todo, no nos separamos según las hormonas o neurotransmisores que tenemos y es muy difícil hablar de química y de “para qué” se usa cada una de las hormonas porque para todos los procesos de nuestro cuerpo y nuestra vida hay muchas sustancias y sistemas involucrados.