Muchas veces, en lo que a sexualidad se refiere, vemos que se mezclan términos que, aunque se dan a la vez durante los encuentros, no son siempre lo mismo. Pasa con la erección y la excitación, por ejemplo: aunque no son la misma cosa, en consulta veo que se utilizan como sinónimos. Es importante saber de qué estamos hablando en concreto, traducir y explicar.
A medida que van apareciendo más términos y más investigación, sigue pasando lo mismo. En parte porque hablamos más del tema, en parte porque, a pesar de hablar más, utilizamos los conceptos de manera incorrecta. Esto último pasa mucho cuando hablamos de orgasmo, eyaculación y squirting. Justo de esto es de lo que vamos a hablar hoy. ¿Cuál es la diferencia entre estos tres fenómenos?
Como decíamos, muchas veces ocurren a la vez y es muy difícil sin (in)formación poder hablar con propiedad y distinguirlos, cosa que nada tiene que ver con el placer que obtengamos.
Cuando hablamos de orgasmo, hablamos de una experiencia cerebral, viene del sistema nervioso. Después de una estimulación placentera prolongada durante la excitación, nuestros nervios mandan un “mensaje” al cerebro y este envía lo que llamamos “disparo orgásmico”, una especie de punto de no retorno para que experimentemos el orgasmo. La estimulación puede ser en cualquier parte del cuerpo, ya que la experiencia del orgasmo no es diferente, por eso no existen los orgasmos vaginales, clitorianos, mixtos o lo que sea, todos son iguales porque vienen del cerebro. Si recuerdas, ya te hablamos de ello en este post de Pimentón Dulce.
Es bastante habitual que durante el orgasmo se expulsen fluidos específicos, y aquí es donde empieza el lío. La experiencia femenina y masculina hasta aquí es bastante similar, pero la masculina es más “visual” o eso creíamos hasta ahora. Cuando una persona que tiene pene “se corre” significa que suele eyacular a la vez que existe un orgasmo, teniendo siempre claro que la eyaculación y el orgasmo son cosas diferentes.
Teniendo la experiencia masculina presente, el lío empieza al hablar de eyaculación femenina y squirt. Hasta hace poco se creía que las mujeres no eyaculábamos porque no había disparo tan evidente. La verdad es que sí lo hay y todo cambia y se empieza a mezclar cuando empezamos a oír hablar de squirt. Empiezan a surgir videos, pornografía, explicaciones,… incluso publicaciones con “tips” y consejos para conseguir llegar al squirt.
Tanto al hablar de squirt como al hablar de eyaculación, se expulsa líquido de manera involuntaria durante el orgasmo, esa es la mayor similitud que existe. Pero si tenemos en cuenta la cantidad de fluido y cómo se produce, hay una diferencia bastante sustancial.
Del squirting como tal llevamos hablando desde hace ya tiempo, aunque no haga tanto ruido como parece. Ya en artículos de 2015 se plantea la posibilidad de que esta cantidad tan vistosa de fluido no provenga de las mismas glándulas que la eyaculación o el flujo vaginal, sino que provenga de la uretra y la vejiga y se formase de la misma manera que la orina, y esa es la primera diferencia. Varios estudios han confirmado esto más adelante, siendo uno de los más recientes de 2022. De la eyaculación, se sabe que son unos pocos mililitros y de consistencia más densa – a diferencia del squirt que serían 10ml o más de líquido transparente y salino –.
Bibliografía
Salama, S., Boitrelle, F., Gauquelin, A., Malagrida, L., Thiounn, N., & Desvaux, P. (2015). Nature and origin of “squirting” in female sexuality. The journal of sexual medicine, 12(3), 661-666.
Pastor, Z. & Chmel, R. (2018). Differential diagnostics of female “sexual” fluids: a narrative review. Int Urogynecol J 29, 621–629
Pastor, Z., & Chmel, R. (2022). Female ejaculation and squirting as similar but completely different phenomena: A narrative review of current research. Clinical Anatomy, 35( 5), 616– 625.
Inoue, M., Sekiguchi, Y., Ninomiya, N., Kobayashi, T. & Araki, M. (2022), Enhanced visualization of female squirting. Int. J. Urol., 29: 1368-1370.
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